Lo que todo amante del vino debe saber sobre
La historia
Fue en 1981, cuando la pareja suiza Brigitte y Bruno Widmer se enamoraron de la entonces abandonada finca Brancaia (Castellina in Chianti) y la compraron. Solo dos años después, Brancaia alcanzó el primer puesto en una importante cata de Chianti Classico y luego rápidamente ganó reconocimiento internacional. Esto llevó a una extensión continua de las actividades que dieron como resultado la compra de la finca Poppi (Radda in Chianti) en 1989, seguida en 1998 por la fundación de Brancaia en Maremma, a solo 10 km de la costa mediterránea. Desde 1998 Barbara Widmer, enóloga e hija de los fundadores, se encarga de la elaboración del vino y de los viñedos de las tres fincas, por lo que cuenta con la asesoría del famoso enólogo Carlo Ferrini. Hoy BRANCAIA es una de las principales bodegas de la Toscana, recibiendo cada año importantes premios nacionales e internacionales. Los vinos se venden con éxito en todo el mundo.
La filosofía
En el centro de nuestros pensamientos y acciones se encuentra el logro de una calidad sin concesiones y el máximo placer de beber para los amantes del vino. Todos nuestros vinos tienen que cumplir con los más altos estándares de calidad, eso es lo que el equipo de BRANCAIA se compromete día a día, buscando constantemente formas de mejorar nuestro trabajo en el viñedo y en la bodega. El principio que nos impulsa todos los días: solo con uvas de primera se puede producir un producto superior. Se necesita un gran respeto por la naturaleza para lograr este objetivo. En BRANCAIA percibimos el trabajo en la viña como un flujo de energía que debe ser respetado al máximo. Para poner esto en práctica cada año de la mejor manera posible, invertimos alrededor de 450 horas hombre por hectárea con un rendimiento promedio de 5.500 kg por hectárea; la calidad nos importa más que la cantidad. Trabajamos de acuerdo con las Directrices para la Producción Integrada (IP), que permite la conservación sostenible de los viñedos y además reduce al mínimo las emisiones de CO2 de los vehículos. Un vino BRANCAIA es un producto natural de altísima calidad. Para el envasado, utilizamos solo materiales de primera calidad para garantizar un almacenamiento óptimo hasta el momento de beber y disfrutar del vino. También intentamos encontrar un equilibrio adecuado, por ejemplo, evitando deliberadamente las botellas "pesadas" para minimizar la carga de CO2 en las rutas de transporte.
Disponible en Corchos:
Corchos z.10 : PBX 2224-1100
3317-5848, 5104-9829, 4944-7000.
